El artista que se convirtió en registrador – y ahora es profesor
Estudié artes plásticas durante 4 años, y desarrollé alguna actividad como artista en tres exposiciones colectivas. Posteriormente estudié diseño gráfico durante dos años, habiendo trabajado poco tiempo como asistente de un diseñador. Tenía entonces 26 años, y contaba con cierto conocimiento de la historia del arte, y sensibilidad estética.
En 1986 comencé a estudiar Historia del Arte en la universidad, y vi publicado un aviso en el que solicitaban un asistente para la oficina de registro en el Museo de Arte Contemporáneo de Caracas (MACC), Venezuela. Exigían estudios de historia del arte, conocimientos sobre manipulación de obras de arte, conservación, inglés, capacidad organizativa, responsabilidad, etc. Presenté mi CV, me hicieron la entrevista de rigor, que incluía la traducción de un reportaje de prensa que hicieron al museo sobre una grandiosa exposición del escultor inglés Henry Moore unos meses antes.
Esto fue en abril de 1986. Estaba ilusionado aunque preocupado, pues había otro candidato que estudió Artes en Inglaterra y tenía un excelente inglés. Pero el día 28 me llamaron para darme la buena noticia de que yo había sido seleccionado para el cargo. Muy feliz, comencé el 2 de mayo.
Yo tenía una cierta “ventaja”, pues conocía bastante bien los museos más grandes de Caracas, y a buena parte de sus colecciones permanentes, incluyendo la del propio Museo de Arte Contemporáneo. La traducción que hice del inglés estuvo muy bien, pues me concentré en traducir al español ideas y conceptos, más que a traducir literalmente las palabras. El caso es que comencé mi carrera, y hasta la fecha (diciembre de 2012) lleva acumulados 26 años continuos de experiencia, siempre con intensos estudios. El sentido común me ha llevado a investigar cómo se registran objetos diferentes a los artísticos, sean culturales, naturalculturales o tecnológicos.
Estuve en el MACC hasta 1993, a partir de lo cual me dediqué a prestar asesoría a otros museos de Caracas y de Venezuela, donde desarrollé una estructura de registro y catalogación computarizada actual y profunda. En 2006 comencé a escribir artículos en prensa y en revistas museológicas especializadas sobre esa experiencia, y sobre los catálogos virtuales que desarrollan algunos museos del mundo occidental. Desde 2007 comencé como profesor en el Instituto Latinoamericano de Museos ILAM, de Costa Rica, impartiendo cursos on-line y presenciales sobre ese mismo tema, más otros temas complementarios.
Siempre me he ocupado de reflexionar sobre nuestra profesión, y estoy vinculado activamente con instituciones y profesionales de muchos países.